¡Hola a todos! Me presento bajo el pseudónimo de ‘Buguilla’, llevo más años metido en el mundo de los videojuegos de los que quisiera, y tan solo querría compartir con vosotros nuestra nueva andadura en el mundo de los blogs aunándolo con una de nuestras pasiones, los videojuegos. Nuestra idea tan solo es la de expresar en unas pocas líneas nuestras impresiones de esta industria, de jugón a jugón, y dentro de nuestras limitaciones y de quehaceres diarios que tenemos.
La idea de este primer artículo me ha surgido con motivo del reciente E3 que se ha celebrado la semana pasada en Los Angeles y tras las declaraciones de Koji Taguchi, ejecutivo de Square Enix en las que decía en su twitter: “tras unirnos con Eidos teníamos juegos como Tomb Raider, Deus y Hitman con los que dar la cara. Pero el declive de los títulos japoneses era casi humillante. Esta semana he estado preocupado todos los días en ver cómo podríamos cambiar esta situación”.
Creo que lo que ha declarado, no le está pasando desapercibido a nadie que siga un poco de cerca el sector, y es que aquellos años en los que Japón reinaba como líder indiscutible de esta industria, han pasado a mejor vida. Una generación actual donde lo que mandan son los últimos motores gráficos, y donde los próximos AAA son secuelas con ligeras variaciones que si acaso llevan a la franquicia a una audiencia aún más masiva que el título anterior, no tiene piedad con una industria japonesa, que parece estancada en la época de la playstation 2; incluso Nintendo que en su día asombró al mundo con el gran Legend Of Zelda Ocarina of Time, ahora intenta impulsar las escasas ventas de 3DS con un juego de hace más de una década, un remake del mencionado Ocarina Of Time adaptado para las tres dimensiones, que ojo no digo que no vaya a ser un gran juego, simplemente son ideas del pasado.
Los grandes talentos de compañías como Square Enix o Capcom, como Sakaguchio o Keiji Inafune han huido, en una búsqueda de nuevas creaciones, pues en sus antiguas compañías, solo se les permitían hacer secuelas año tras año. Aquellos que han permanecido, no cuentan, a pesar de las ventas, con el presupuesto necesario para hacer un motor gráfico que esté a la altura de los tiempos, ¿alguien ha nombrado la saga Pro Evolution Soccer que arrastra un motor de la época de Playstation 2?
Creo que solo el tiempo dirá si la industria japonesa, con un público tan conservador y defensor de mecánicas clásicas, es capaz de renovarse y no morir en el intento. Porque una industria que ha sido tan decisiva en el impulso de lo que son las cosas hoy, se merece un futuro menos gris que el que se presenta actualmente.
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